cada extremo de este cuerpo
retazo de piel
barro de acopio en el rincón de este taller cotidiano
arcilla hambrienta de roce
sedienta del toque sustancial del escultor que la modele
arcilla hambrienta de roce
sedienta del toque sustancial del escultor que la modele
en el piso
amontonada
dormida
amontonada
dormida
espera voraz esas manos creadoras
que logren reanimar sus ganas
dedos dueños
hundiéndose en su forma
hundiéndose en su forma
pretendiendo traspasar lo superfluo
despertar al alma aletargada
resucitar la humedad latente
voluntariamente escondida.
Guau!Día tras día fluye una poetisa más potente...
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