viernes, enero 25, 2013

Memoria desabrida.


Debería ser capaz de amores imposibles.... 
pensé.
Amores imposibles...
Intelectualmente sería útil tener amores imposibles.
Y me acordé de vos.
Intenté revivir algo pero mi memoria hace imposible los amores imposibles.
Mi falta de memoria.

¡No recuerdo nada!

Ni la primera sensación de tus labios en los míos,
si es que tus labios tocaron mi boca.
Ni si hubo besos en el medio.
Ni si nos despedimos con un beso al final.
Podrías volver a recordármelo algún día.

¡Cómo ser mujer de amores imposibles si soy desmemoriada!


¿Acaso nos dimos algún beso?


¡Qué improductiva mi memoria!

Para completar, lo platónico me huele a enlatado.
Muero por comida casera tibia y recién hecha.
Podrías cocinarme un día, o varios.
Lo prohibido me abomba como la baja presión atmosférica de estos días.
Me aburre como la lectura de libros preceptivos que dejan esa sensación de tiempo perdido.

?Pero será posible que no nos hayamos dado ningún beso?


A veces quisiera ser esa clase de mujeres que se ancla en abismos de amores sin destino.

Y me obligo a intentarlo escarbando recuerdos.

Podrías volver a darme un beso si es que no lo hicimos.


Me fuerzo a abrir esas heridas cicatrizadas hace tiempo, pero mi libertad,

me invita siempre a otros vuelos más livianos,
menos tercos.

Sigo sin recordar tus labios y me indigno.

¡Qué mujeres esas! Esas que filtran muerte por sus gangrenas incurables.
Yo no puedo.

No soy mujer de amores perdidos,

si ni soy capaz 
de recordar si me besaste.



No hay comentarios:

Publicar un comentario